Una manera muy fácil y sencilla de conseguirlo es ser consciente de nuestro estado interno. Para empezar a entrenarlo te recomiendo los siguientes pasos:
- Cerrar los ojos y tomar una respiración profunda.
- Prestar atención al ritmo de los latidos de tu corazón .
- Observar cómo sientes tu cuerpo
- Centrar la mente en el pensamiento que surge
Si te das cuenta de que estás de mal humor, triste, nervioso o preocupado, basta con evocar un recuerdo agradable de tu pasado y automáticamente cambiará tu estado.
¿Te atreves a probarlo?
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